Los viajes de Cristóbal Colón pusieron en contacto a las culturas que habitaban el continente americano con la cultura europea. Hasta ese momento, estas culturas se habían desarrollado en forma aislada, sin siquiera sospechar su existencia mutua.
El territorio hoy conocido como América era habitado por una gran cantidad de pueblos. Algunos, como los mayas, aztecas e incas, habían llegado a constituir grandes imperios. Los mayas, por ejemplo, desarrollaron cálculos para medir con exactitud el tiempo y los movimientos de los planetas. También manejaban un sistema de escritura. Los incas, por su parte, construyeron una impresionante red de caminos y carreteras en Los Andes, que comunicaban con rapidez los diferentes puntos del imperio.
Además de los grandes imperios existían muchísimos pueblos con otro tipo de organización social. Vivían en aldeas o poblados y practicaban la recolección de frutos silvestres, la caza o la pesca.
Cómo guardaban sus memorias
Los hombres que habitaban el territorio americano guardaban la memoria de sus pueblos de diversos modos:
* Los aztecas
Los aztecas, utilizaban códices (libros) para guardar sus recuerdos escritos. Los historiadores los estudiaron para conocer en detalle muchos aspectos de la vida de esta civilización.
Los códices eran realizados por los sacerdotes y solamente ellos tenían acceso a estos libros. Sin embargo hay muy poca información sobre los autores. De hecho no se sabe si pintaban en los templos o lo hacían en sus casas. Las crónicas hablan de que existían grandes depósitos de libros, donde se guardaban los documentos del imperio.
Como nadie excepto los sacerdotes tenían accesos a los códices, los reyes y nobles indígenas consultaban a los sabios acerca del contenido de los libros pintados.
Los primeros sacerdotes católicos que llegaron a América sospechaban que los dibujos que aparecían en los códices encerraban supersticiones. Por eso ordenaron quemarlos. Después, muchos españoles curiosos por conocer los secretos que encerraban los códices se lamentaron de que los hubieran destruido de ese modo.
* Los incas
Habían desarrollado un sistema de control de las cuentas del Estado a través de los quipus (del quechua khipu).
Los quipus eran cordeles, que solían estar hechos de algodón o lana a base de pelo de llama o alpaca, estos se coloreaban y se anudaban. Una vez hecho los hilos se codificaban en valores numéricos siguiendo un sistema posicional de base decimal. Esta herramienta permitía llevar registros y la contabilidad. Por ejemplo, con un quipu se podía conocer cuántos granos de maíz se almacenaban, cuántos soldados había en el imperio, cuántas personas nacían o morían. Había un funcionario encargado de descifrar estos mensajes que se llamaba quipucamayor.
Si bien estos pueblos no tuvieron una cultura escrita, su historia se narra a través de los objetos encontrados en excavaciones arqueológicas, como los tejidos en telares, que permiten conocer algunos secretos de estas culturas.
La Conquista (en palabras de algunos españoles de la época, por eso el vocabulario))
«Aquellos indios se llegaron a la barca, y la gente della, cristiana, salió en tierra; comenzáronles a comprar los arcos y flechas y las otras armas, porque el Almirante así lo había ordenado; vendidos los arcos, no quisieron dar más, antes se aparejaron para arremeter a los cristianos y prenderlos, sospechando, por ventura, que de industria los cristianos les compraban las armas para después dar en ellos. Viéndolos venir denodados, los españoles, que pocos desean ser mártires, que no dormían, dan con ímpetu en ellos, y alcanzó uno dellos a un indio una gran cuchillada (...). Y esta fue la primera pelea que hobo en todas las Indias, y donde hobo derramada sangre de indios, y es de creer que murió el de la saetada, y aun el de las nalgas desgarradas no quedaría muy sano.»
Tomado de: Fray Bartolomé de las Casas.
Historia de las Indias.
«Los heridos no sabían qué hazer para curarse, sino dar gemidos de dolor de las llagas, que hombre huvo entre ellos que entre él y su cavallo tenían veinte y tres heridas, dellas grandes y dellas chicas. Proveyóles Dios en esta necessidad, que entre otros indios vieron venir a uno cargado con una petaca lleva de velas de sevo y ellos mismos lo derritieron en dos cascos de hierro que sus amos acertaron a llevar, y truxeron del estiércol del ganado de aquella tierra (...) y hecho polvo lo mezclavaban con el sevo, y assí caliente, cuanto se podía çufrir, lo echavan en las heridas y las llenavan, por hondas que estuviessen, y con lo mismo curaron sus cavallos [...].»
Tomado de: Garcilaso de la Vega, Historia General del Perú.
«Estos Querandís son tan ligeros, que alcanzan un venado por pies, pelean con arcos y flechas, y con unas pelotas de piedra, redondas (...) y tan grandes como el puño, con una cuerda atada que las guía, las cuales tiran tan certero, que no hierran a cosa que tiran.»
Fragmento de una carta escrita el 10 de julio de 1528 por Luis Ramírez,
soldado de la expedición de Gaboto al Río de la Plata.
El original está en la Biblioteca del Escorial.
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ResponderBorrarSoy Santi Pereyra.
ResponderBorrarHola, seño, lo que más me gusto fue las cuchilladas en las nalgas.
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ResponderBorrarHola seño soy Agustin Roncaglia , le cuento que lo que mas me llamo la atención es que se curaban las heridas con estierco de ganado y sevo caliente.
ResponderBorrarHOLA SEÑO SOY ROCIO. LO QUE MAS ME GUSTO ES EL SISTEMA DE QUIPUS QUE USABAN LOS INCAS. Y LE DIJE A MI MAMA QUE EN LUGAR DE LLEVAR TANTOS PAPELES DE LA CONTABILIDAD DE LOS CLIENTES USE ESE SISTEMA DE SOGUITAS CON NUDOS.
ResponderBorrarEs hacer* no hazer
ResponderBorrarque lastima que quemaron las memorias de los Aztecas soy fran recalde
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